Bye Bye Blackbird

Llevo mucho tiempo sin publicar entrada alguna en este blog que comencé con una cierta ilusión para hablar de sentimientos. Pero desde octubre hasta ahora parece que los Dioses se han conjurado en mi contra y me han noqueado por cinco a cero. Y en esos momentos te olvidas de tus sentimientos para simplemente sobrevivir y estar lo más serena posible para afrontarlos; pero de todo se sale y "petit à petit" voy cerrando cada una de esas hendiduras......y una de esas brechas es la del amor, que no se tiene pero que se desea y se intenta suplir con un "genérico" conocido, tóxico, en el que sigues buscando un gramo de ternura, la ternura que nunca te dió y que nunca te dará.

Después, en la soledad de esta tarde de domingo, lloras y te desahogas un poco con la película de turno, de final feliz (que le vamos a hacer) y piensas en esa otra persona que se cruzó en tu vida hace algo más de un año y que, aunque sabes que es un "impossible love", no olvidas.....pero eso será otro capítulo; ahora toca decir "bye bye blackbird"


Publicada en 1926 con música de Ray Henderson y letra de Mort Dixon, ha sido interpretada por los/las más grandes, desde Sarah Vaughan (la primera versión que escuché hace años en casa de mi amigo Josep Garriga) a Melody Gardot, pasando por Etta James, Nina Simone, Sinatra, Rickie Lee Jones (la segunda versión que escuché), Liza Minnelli, Joe Cocker, Ringo Starr, Diana Krall, pero me quedo con la última que he visto en Youtube: Julie London, acompañada únicamente por un contrabajo, increiblemente elegante y sensual.